Peñíscola
El Castillo Templario de Peñíscola habitado por el Papa Luna y rodeado de leyendas constituye, tanto por su emplazamiento como por sus características arquitectónicas y su historia lo más relevante de la ciudad.
Estando en perfecto estado de conservación aún se permanecen en el los escudos del Maestre de la Orden Templaria de Cataluña y Aragón y el del Comendador de Peñíscola, promotores de su creación, como testigos imborrables de los últimos días de la misteriosa y enigmática Orden de Los Templarios.
Con una historia plagada de acontecimientos, que fueron vitales para la humanidad; Peñíscola conserva la esencia Medieval como nadie y lo ventajoso de su ubicación y clima la convierten en la ciudad turística por excelencia del Mediterráneo.
Este Mediterráneo impregna con su magia todos los rincones de esta ciudad marinera. Sus estrechas y empinadas calles, sus casas blancas rodeadas por su muralla y los balcones floridos que acompañan con sus aromas y coloridos los pasos del caminante, son la antesala indiscutible de la felicidad.
El ocio entremezclado con la historia y sus playas sin igual hacen de Peñíscola el lugar mágico que siempre el viajero llevara grabado en su memoria.
“También y como homenaje a su historia el cine estuvo presente en multitud de oportunidades, siendo la más destacada la famosa película EL CID, interpretadas por Charlston Heston y Sophia Loren, rodada íntegramente en la ciudad y el Castillo, Templario.”